España es, por principios y méritos propios, un país de pandereta, de ignorantes y de vividores sin trabajo ni beneficio.
Y para no desentonar en medio de sus conciudadanos, salen unas declaraciones del flamante Director General para el Desarrollo de la Sociedad de la Información, un cargo de la Administración (pagado por todos), que afirma, ni corto ni perezoso, que: "el software libre está bien, pero... para que las pequeñas empresas españolas tecnológicas ganen dinero, es necesario que vendan su software, de ahí que no puedan optar por el software libre".
Además, y según él (todo hay que decirlo), la Administración no puede apostar por los estándares abiertos porque (según él, repito) hay directrices europeas que se lo impiden.
Y eso es el Director General, vaya país de analfabetos!
